Cuando tú vas, yo Volvo

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· Sobre la unidad motriz original se le han sacado 400cv de potencia

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Soy poseedor de un Volvo 244 Turbo del año 78 versión americana, con parachoques metálicos modelo "Commando", tracción trasera y caja de cambios manual 4 velocidades. A pesar de ser un modelo poco visto, lo tengo todo original tanto por dentro como por fuera, pero con una curiosa preparación mecánica. Sobre la unidad motriz original se le han sacado 400cv de potencia, algo raro de ver en coches así.

La mecánica es la original de Volvo. Es un motor 2.3l 4 cilindros, pero convertido a inyección Bosch LH Jetronic 2.4. 

Fabriqué unos colectores de escape en inoxidable para acoplar un turbo más grande tipo Garrett t70 soplando a 2 bares con boost hasta 2,5. Lleva admisión Edelbrock con válvula de descarga, inyectores Bosch de 440cc e insufladores de doble vía para sistema húmedo de óxido nitroso. En este caso el sistema de óxido nitroso y solenoides de control que llevo montados son de la casa NOS. Al ser un sistema en húmedo (añade n2o y gasolina extra a la mezcla), se gana un extra de 100cv aprox durante una lanzada de 6 segundos. El sistema es activado desde el botón "overdrive" que se halla en el centro de la palanca de cambios.

El sistema de distribución lleva un árbol de levas con fase variable, unas poleas ligeras y un volante de inercia de magnesio, reduciendo así su peso y aumentando su dureza. Lo mismo ocurre con pistones, bielas y cigüeñal, ofrecidos por la casa Wösner, siendo estos más resistentes a los esfuerzos que los originales. Línea de escape artesanal de 3" sin restricciones.

En cuanto a la transmisión, equipa un embrague con paquete multidisco para mejorar su función, la caja de cambios lleva rodamientos reforzados y el diferencial es un Quaife autoblocante de doble sentido.

El tren motriz cuenta con unas pinzas de freno Brembo de 4 pistones, latiguillos metálicos, llantas "Hydra" originales de Volvo Turbo y neumáticos 205/40 16 delante y 225/35 16 detrás. La altura de la carrocería va controlada por una suspensión neumática.

En el interior podemos encontrarnos una tapicería en un increíble buen estado, todo original y bien cuidado hasta el último detalle. Mantiene la radio original, el pomo de cambio de 4 marchas, las alfombrillas originales y un cuadro que tan solo marca 90.000 kms.

Hasta el volante es original, sin dirección asistida. Un precioso manómetro de turbo analógico preside la consola central, con una iluminación verde a juego con toda la iluminación interior del vehículo.

Oscar Llabrés 

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