Como años anteriores la participación fue muy alta, nos visitaron 146 vehículos, venidos de distintos puntos geográficos, entre coches y motos con años de fabricación anteriores al 1985.

Podríamos destacar entre todos un Austin Seven 1928, o una de las pocas unidades del Toyota Celica réplica Carlos Sainz. En motos tuvimos el placer de contar con el Club Vespa España entre otros clubes, defiendo entre sus filas una vespa de 1961 en perfecto estado de conversación.

Todos los participantes aportaron su granito de arena con la entrada solidaria, para la ayuda a las personas más desfavorecidas, cediendo todos estos alimentos a la casa de la misericordia para su distribución.

En la zona de comercio se dieron cita más de 20 stands de distintas empresas con una amplia oferta. Para amenizar todo esto se contó con la presencia de DJ Fran, que un año más nos deleitó con su música de los años 40 y 50. Como novedad de este año, la Asociación de Blues Sierra Norte de Madrid tuvo la cortesía de montar un Jam session alternándose en el escenario más de 15 músicos. Tampoco nos podemos olvidar de la zona infantil que brindo castillos hinchables, coches a pedales para seguridad vial y cuenta cuentos.

La oferta gastronómica fue uno de los factores clave del evento, en su representación se convocó a tres food-truck gourmet que nos ofrecieron un extenso abanico de posibilidades culinarias. Como no podía ser menos, la entrega de premios se realizó con las distinguidas personalidades y el equipo de gobierno del ayuntamiento de San Agustín del Guadalix. Pese a la adversidad de la meteorología, el evento se cerró con unos resultados bastantes gratos, porque si el resultado de la participación de vehículos fue alta, la de visitantes estuvo a la altura con una presencia de más de 2000 personas.

Rubén López