5 diciembre, Tenerife
La feria Retro-Abades en este caso en Tegueste (municipio perteneciente al norte Tenerife), consolida su cometido y buen hacer después de 74 ediciones que, contra viento y marea, fielmente ha cumplido su misión con los aficionados y amantes del motor clásico, y digo ha cumplido pues este pasado domingo 5 de diciembre, será lamentablemente su última edición.
Una vez todo preparado, organizadores, puntos de venta de repuestos y accesorios para clásicos y compra-venta de vehículos entre particulares, se dio la entrada, a las 9 h a los más madrugadores al interior del recinto, manteniéndose una media fija de aforo de 170 vehículos y siendo contabilizadas más de 400 entradas, además de aproximadamente entre 2.500 y 3.000 personas durante toda la jornada, pues los participantes tienen la ventaja de libre asistencia de 9 a 14 h con la mínima condición de que sean 25 los años de antigüedad del vehículo, oportunidad que desde sus inicios los propietarios aprovechan para relacionarse y contactar con otros aficionados.
En esta ocasión, asistieron parte del grupo TR Register España con varios modelos de esta reconocida marca británica con residencia en Tenerife, a los cuales les fue entregado por parte de la directiva un bonito detalle, para el resto de los asistentes tendríamos que abrir un fichero entre todas las marcas, modelos, países y años de fabricación que hicieron una colorida fiesta del motor clásico que alegraron esta soleada mañana de domingo otoñal.
En palabras de Don Francisco Martin, Presidente de la escudería PJ Elvis (empresa organizadora de este evento) no quiere despedirse, solo decir un hasta luego, pues queda en suspense la posibilidad de más adelante y de manera esporádica organizar algún evento de este tipo o también que, alguien que le guste tome el relevo con constancia y seriedad, ya que esto es un lugar de encuentro entre seguidores y sería una pena perderlo y aunque la ilusión y el empeño mantienen el mismo nivel, el cansancio, falta de ayudas, renovación de materiales, planes de seguridad, seguros, el trabajo logístico semanas antes del evento y seis personas controlando, no es tan fácil llevarlos a cabo.
Muchas son las anécdotas y acontecimientos que han tenido lugar en todos estos años (publicados año a año en esta revista), algunas buenos y otros no tanto, pero siempre con la ilusión de haber llevado a buen fin este proyecto, el cual edición a edición requirió una gran experiencia de renovación, seriedad y nuevas ideas que hicieron más atractiva cada una de ellas sin caer en la rutina. Agradecimientos a su equipo colaborador, clubes y personas que voluntariamente comprometidas, siempre estuvieron dispuestas a contribuir en lo que hiciera falta, además de tener siempre la seguridad de que lloviera o el sol rajara las piedras, cada primer domingo de mes había feria. Así que, bien está lo que bien acaba.
Texto y fotos: Lorenzo Suárez Dorta
