Con una primera edición celebrada en la primavera del año 2010, el Clásicos del Atlas se convirtió en la primera de las carreras de regularidad para vehículos veteranos de formato multimarca en Marruecos, aumentando sus las carreras celebradas con las ediciones invernales y creando un triangular al poner en marcha el Guadalquivir Classic Rally, que se celebra en otoño atravesando Andalucía.

Para este año, se han querido rememorar las etapas más selectivas de las celebradas, mejorando la logística de los equipos al tener la localidad de Erfoud como epicentro lo que permitió a los equipos competir sin los efectos personales a bordo y poder reengancharse a la carrera. Por encima de todo: la faceta solidaria, que obliga a cada vehículo a transportar desde casa ropa, material escolar o similares para entregarlos en las zonas más desfavorecidas por donde pasa la carrera.

Desde la organización, se quiso conmemorar tan significativa edición con un recorrido que adaptándose al formato de trébol con salida y meta en lugares próximos, rememorara atapas legendarias de ediciones anteriores. En la categoría de todo terrenos de más de veinte años, se impuso Suzuki Vitara de Solis-Casanas, el primer 4x4 “veterano”, fue el Daihatsu de los Espinosa padre e hijo. Entre los turismos de más de treinta años, inmejorable actuación de Lucas-Cifuentes quienes no solo se colocaron entre los mejores 4x4, sino que casi ganan la carrera. Entre los de más de veinte años, el mejor fue el equipo portugués Ferreira-Andrade, siempre rápidos con su Citroën AX. Con el seguimiento digital optimizado, la caravana estuvo controlada en todo momento, asistiendo a las averías y a las pérdidas de forma inmediata y elaborándose las clasificaciones de forma instantánea.

Ángel Montalbán