18 son ya los años que lleva dicha iniciativa pulsando el botón de retroceso de la Región e inundando sus carreteras con vehículos que sin duda harían las delicias de cualquier apasionado del motor.

Como no podía ser menos, la vigesimoctava edición ha estado repleta de coches antiguos venidos de diferentes puntos del territorio nacional y contando con algunas unidades con más de un centenar de años entre sus ejes. Marcas míticas como Ford, Chrysler o Rolls Royce compartieron las carreteras de la Región con otras menos reconocidas como Chenard Walcker y su modelo Torpedo Sport.

Han sido 36 los vehículos participantes esta edición, 36 joyas de la automoción que lograron cautivarnos a todos los que pudimos pasear un rato junto a este museo rodante.

El Balneario de Archena fue nuevamente el lugar elegido como punto de encuentro de todos los participantes de la decimoctava edición de un evento ya consagrado en los calendarios de mundo del motor antiguo.

En las tres etapas de que constaba esta edición se visitaron ciudades como Calasparra, en donde los participantes pudieron degustar el arroz tan famoso como sabroso a los pies del Santuario de la Virgen de la Esperanza, un lugar idílico para pasar una jornada entre amigos. Otro de los puntos de destino fue Cieza, que nos brindó un día maravilloso, con un sol típico de tierras murcianas, en el que pudieron contemplar un momento mágico que nos brinda la naturaleza, la floración de los frutales, que tiñen de colorido los campos de la comarca. Para despedirse y ya de camino a la capital, los vehículos pararon en la localidad de Espinardo, cuna de una de la cerveza más apreciada por los murcianos Estrella de Levante. Los silos que se encuentran en la fachada principal recordaron tiempos pasados al ver de nuevo frente a ellos, los coches que antaño ocupan la carretera.

Como hemos dicho el Rally acabó en Murcia, en la Plaza del Cardenal Belluga y frente a la Catedral. Cientos de curiosos no se pudieron resistir a acercarse y fotografiar tanto a los vehículos como a los participantes, que como algunos ya saben, en este Rally van caracterizados con la vestimenta correspondiente a la época de su automóvil, algo que hace aún más singular el rodar de esta caravana por los pueblos de la Región.

Le preguntamos a Joaquín Ros Alhama, organizador del evento y presidente del Club Ruta del Sol, que como se logra que en los tiempos que corren, un evento no deportivo, sin fin lucrativo, llegue a la mayoría de edad; a lo que nos respondió: “el secreto es contar con participantes que han pasado a ser amigos y en algunos casos casi familia, estamos en un punto en el que el Rally Región de Murcia es similar a juntarse por fin de año con el grupo de amigos de la infancia. Marzo es para nosotros el momento de reencontrarte con gente que hace un año que no ves y que con solo unos días al año, se ha logrado crear un vínculo especial y aprovecho la ocasión para invitar a los lectores a que se animen a participar en la próxima edición y comprobarlo por sí mismos”

Texto: Danny Cruz