Pocos coches han tenido un impacto tan grande en su época como el Renault 8 Gordini, que apareció en 1964 para abrir la emoción de la conducción deportiva a toda una generación.
Aunque el “Gordo”, como se le conoce cariñosamente, se basó en el R8 Major, tuvo modificaciones de competición de la mano del asistente Amédée Gordini que lo dejaron irreconocible. El motor del modelo original se transformó para sacar casi el doble de potencia, una nueva culata y dos espléndidos carburadores Weber. Luego, las suspensiones, la dirección, los frenos y el equipo se actualizaron de manera consistente con la velocidad máxima de 175 km/h. Aspectos deportivos como el cuadro de instrumentos redondos y un acabado azul con rayas blancas. El motor de 1.108cc de la versión inicial dio paso a una unidad de 1.255cc.
En competición, La Copa Gordini, presentada en 1966, sirvió para crear el mito R8 Gordini, consolidando su reputación con una impresionante lista de triunfos de carreras. Muchos pilotos de carreras aprendieron su oficio al volante de un R8 Gordini, y conservan muy buenos recuerdos de él. En 1970, el pequeño gran R8 Gordini finalmente dio paso a un modelo R12 con el mismo nombre.