Retrocedemos hasta el año 1995, cuando Volkswagen presenta en París el modelo Harlekin. Un vehículo formado por cuatro colores (verde, rojo, azul y amarillo) que se combinan simétricamente en sus piezas móviles siguiendo 4 patrones diferentes que se alternan en cada versión de chasis. En el interior resalta su volante azul, su tapicería acorde a los colores, los ribetes de las alfombrillas en colores y pomo de la caja de cambios serigrafiado (Harlekin). Sus motorizaciones, suelen ser 1.1, 1.4, y rara vez 1.6.
En la factoría Volkswagen Pamplona, a finales del año 95 y principios del 96, deciden fabricar 20 unidades, no con la idea de comercializarlos, sino para ser vehículos de fábrica, utilizados por personal y mandos de factoría. Son unidades con unos acabados interiores que nada tiene que ver con los modelos alemanes, ya que son dotados de muchos más extras: Aire acondicionado, ABS, espejos eléctricos calefactables, airbags, tapicería en cuero (asientos, volante, caja de cambios y freno de mano), reposacabezas trasero, llantas aluminio modelo Indianápolis, faros antiniebla, cierre centralizado, sistema de audio de cuatro altavoces, elevalunas eléctricos, motores 1.6 75cv, etc. En el interior de estos vehículos no se aprecian los acabados Harlekin anteriormente mencionados.
La marca utilizó estos vehículos para promocionar el lanzamiento del VW Polo de la época, acompañando la Vuelta Ciclista de 1995. Debido al éxito de la campaña, el 15 de julio de ese mismo año, la factoría de Volkswagen en Pamplona recibe la orden desde Alemania de fabricar en serie el modelo “Polo Harlekin”, que nacería así oficialmente.
Desde ese momento es comercializado en varios puntos de Europa. En España, el precio de este vehículo fue alrededor de 2.000.000 de las antiguas pesetas. Mi coche que podemos ver en la foto de arriba (matrícula de Navarra), fue adquirido hace 23 años a la factoría en la cual yo trabajaba, y a día de hoy se encuentra en estado original, muy cuidado, mimado y sin intenciones de alterarlo.
En el grupo Harlekin España somos 18 miembros, disponemos con gran entusiasmo de 15 Harlekines, de los cuales, varias unidades son preseries fabricados en Pamplona y están repartidos por toda España. Seguimos cuidándolos, para que este vehículo tan peculiar y con una cotización al alza, sea conocido y no olvidado. Además, buscamos nuevos Harlekines, que serán bienvenidos en el grupo, aunque por desgracia quedan muy pocas unidades originales. Aprovecho para dar las gracias a Clásicos San Fermín por abrirme las puertas del club con este vehículo, que no es un clásico ya que aún no tiene 30 años, pero es peculiar y original, llamando la atención de los visitantes en las exposiciones y despertando una curiosidad que hace que salga a la luz la historia de este mítico coche de los maravillosos años 95.
David Liberal García
