La empresa italiana ALFA, acrónimo de Anónima Lombarda Fabrica Automobili, se fundó en Milán el 24 de junio de 1910, dedicándose a la automoción. Instituyó como emblema la cruz roja sobre fondo blanco y la serpiente sobre fondo azul. Aparte de turismos, la marca fabricaría también camiones y furgonetas. Ya en los años 40 del siglo XX, hubo un intento fallido de unión de Alfa Romeo con Hispano-Suiza.
Andando el tiempo, la empresa acude al Salón del Automóvil de Turín, presentando en 1954 el Alfa Romeo T 10. Construyó diferentes modelos de furgonetas, capitoné, combinadas con ventanillas adicionales y asientos traseros, microbús, ambulancia, pick-up, camioneta abierta y de cabina doble, con 35 CV y velocidad de 97 km/h. Se comercializa el producto “Alfa Romeo Romeo”, que inaugura el “Romeo 1”, interesante, eficaz y veloz. El “Romeo 2” se haría, sin pausa, tanto en Italia como en España, aquí bajo licencia, por FADISA. La versión española, de tracción delantera, estaba equipada con motor diésel Perkins. El “Romeo 3”, la versión final, llegó en 1966, mejorada, tuvo una vida efímera, siendo reemplazado por los modelos A12 y F12.
La llegada de FADISA (Fábrica de Automóviles Diésel, S. A.) se constituyó en Madrid, instalándose la factoría en Ávila en 1956, con un capital social del orden de los 80 millones de pesetas. En 1959 llegaron los primeros vehículos al consumidor, 38 unidades. FADISA comenzó fabricando el Autotutto, pasando, casi sin pausa, a la citada “Romeo 2”, fabricada por la empresa italiana entre 1954 y 1983 en diversas versiones y denominaciones.
En 1967 FADISA pasa a Motor Ibérica (fabricante de “Ebro”), añadiéndose a su gama los fabricados de FADISA, que a la fecha llevaba fabricados 7.000 unidades. Por cierto, ya en 1964 se cambió la caja de cambios, que pasó a fabricarse en Sevilla por la extinta ISA (Industrias Subsidiarias de Aviación). Este tipo de furgoneta la usó mucho el entonces Ministerio de Marina (hoy Cuartel General de la Armada), Iberia Líneas Aéreas de España, “Cervezas Dmm”… Cabe detenerse en el lote de adaptados a microbús urbano que fue adquirido por el Ayuntamiento de Sevilla, por el Servicio Municipal de Transportes Urbanos, quien inauguraría su servicio de microbuses el 20 de abril de 1965, con la línea A (San Vicente-Plaza Nueva), adquiriéndose, en principio, 7 microbuses (SE-87721 a SE-87727) que fueron ampliándose paulatinamente, pasando de Alfa Romeo (por cierto, en la delantera rezaba “Romeo Fadisa”) a Ebro. Aquellos microbuses, de una sola puerta para entrar y salir el usuario, ostentaban un bello diseño, pero diferente a lo conocido a la marca por entonces, conservando sus formas clásicas exclusivamente en su frontal.
Todos los viajeros iban sentados, carecía esta primitiva línea A de paradas fijas, es decir, había libertad para el viajero de subirse y bajarse libremente donde quisiera, admitiéndose fumar dentro del vehículo. Estrenaron por entonces los conductores uniforme nuevo y diferente al establecido por la empresa, azulón y más bello que el que se utilizaba para autobuses, color ocre. Tanto gustó este uniforme que el de color ocre sería paulatinamente sustituido por el azulón, tanto para autobuses como para microbuses, y que no es otro que el que utilizan en la actualidad. Como prueba de haber conocido estos vehículos de forma personal, deseo añadir ya la furgoneta de un amigo, que tuvo muchos años, muy cuidada y de comportamiento extraordinario, desde 1963, y que ostentó la matrícula SE-75889.
Francisco Glez. Del Piñal Jurado
