En esta su quinta edición y a pesar del tiempo inestable, ha contado con la presencia de numerosos expositores y un buen elenco de coches, de todas las marcas y diferentes épocas, aunque especialmente destacaron ‘youngtimers’ y representantes de los ‘treinta gloriosos’ que es como se denomina allende los Pirineos a las décadas de entre los 50 y 70 cuando las casas francesas sobresalieron sacando algunos de los automóviles más glosados y vendidos de la historia.

Igualmente destacable la participación de aficionados españoles con algunas ‘joyas’ realmente memorables y entre los visitantes, importante la presencia de gente de este lado de la frontera. Todo ello afianza a este evento como uno de los más importantes del País Vasco Navarro en su conjunto.

Con esta gran cita se normaliza el calendario habitual del club Soupapes et Pistons, con concentración fija los segundos domingos de cada mes entre las 9 y las 12 en el Espacio Arène que obra de pequeña Plaza de Toros junto al frontón y otros eventos que se plantean esporádicamente, salidas o participación en reuniones de otros clubes, como la reciente travesía ‘Navarra de Norte a Sur’ organizada por la escudería hermana San Fermín de Pamplona que, un año más, se llevó el diploma, la copa y el regalo al club mejor representado en el evento.

Si todo va bien, este curso va a ser importante porque se proyecta en Hasparren celebrar las Jornadas Nacionales de Vehículos de Época que es día señalado, el más importante para el automovilismo galo de colección que organiza la FFVE.

Este evento nacional no está centralizado, sino que se organiza en diferentes actos por regiones, cobrando así la amplitud y el boato que afición tan extendida tiene entre los franceses.

Dada la situación sanitaria aleatoria, para que pueda celebrarse, queda pendiente de la aprobación de la Junta de Presidentes de la institución y si es así, como siempre, los aficionados españoles estarán especialmente invitados a unirse a esta importantísima jornada de confraternización.