Imprimir esta página

La celebración de los 40 años de Llotja de Sils no pasó desapercibida

Valora este artículo
(4 votos)

La celebración de los 40 años de Llotja, no pasó desapercibida y tal como teníamos previsto, muchos medios informativos estuvieron presentes en la Llotja.

banner-miclasico.gif

Esta ha sido muy posiblemente una de las ediciones con material más exclusivo y abundante. La Llotja se abría al público con más de 50 automóviles en venta y una cantidad superior a las 400 motocicletas repartidas en los 282 espacios preparados para recibir a los expositores, que este año nos llegaron de Inglaterra, Francia, Italia y de toda España.

La CARpa, con un nuevo emplazamiento dentro de la Llotja, mantuvo un nivel de visitas muy alto, con las continuadas preguntas por parte de compradores sobre el estado y funcionamiento de los vehículos expuestos, entre ellos, un Alfa Romeo 1750, un Jaguar cabriolet V12, Citroën’s Mehari, diferentes Porsche y una nutrida selección de vehículos populares españoles, como SEAT 600, Renault 12, 4L Furgoneta etc, y destacando entre los de antes de pre-guerra un precioso y bien acabado Citroën 11cv.

Como ya ocurrió en la edición anterior, los partes meteorológicos hicieron variar la asistencia de público de forma radical, con una mayor presencia de visitantes durante el sábado, pues la predicción del tiempo era de tormentas y lluvia en la provincia de Girona para el domingo, una lluvia que llegó, pero cuando la Llotja ya prácticamente estaba limpia de expositores y materiales de desecho, pues este año la organización tenía prevista la limpieza a partir de las 4 de la tarde del domingo.

A medida que la organización comentaba con los expositores sobre sus ventas y asistencia de público, los expositores incidían en que sus ventas habían mejorado y su grado de satisfacción general era muy positivo, unas opiniones que esperamos se vean consolidadas en un futuro. De nuevo las avenidas Pegaso y Seat así como las calles Bultaco, Montesa, Ossa y Derbi, se vieron llenas de visitantes con una estimación total superior a los 10.000 visitantes.

Cada vez más el sentido general de la Llotja va cambiando. Los expositores y los visitantes que acuden a la Llotja, saben que van a pasar un día de fiesta, esto se ve cada vez con más incidencia en los stands de los expositores, en donde las barbacoas y el olor a carne a la brasa forma parte de la gran fiesta que Sils celebra anualmente con su Llotja.

Durante el montaje de los expositores el viernes, muchos los visitantes llegados de fuera de Catalunya, no se querían perder el ir viendo lo que se iba descargando de los vehículos de estos, iniciándose este mismo viernes toda una serie de compra venta, ya fuesen entre expositores o visitantes.

En Sils, la motocicleta es la reina, pero va tomando mucho incremento la afición a la bicicleta. Entre los expositores pudimos ver dos magníficas “gran bi” anteriores al 1890, llegadas de Francia como también dos buenas bicicletas de antes de 1900 o una curiosa bicicleta de madera art decó. Las motos y los recambios de motos son por ahora el gran alicientes de la feria y de nuevo los principales expositores moteros no dejaron de asistir a la Llotja a la cual se presentaron cargados buen material, Bultacos, Montesas, Fusté, Yamaha TZ, Ducati, etc. etc. Y todo esto sin olvidar a los estands de herramientas, seguros, temas eléctricos, gomas, perfiles o material técnico.

Y como siempre y ya desde su primera edición la Llotja, se mantiene su entrada gratuita a todos los visitantes de la mano de la Col·lecció d´Automòbils Salvador Claret.

Artículos relacionados


    ...