Imprimir esta página

Un plan de movilidad improvisado que expulsa a los donostiarras del Centro de la ciudad

Valora este artículo
(2 votos)

Ante la presentación del Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián del nuevo modelo de movilidad de la ciudad que contempla el cierre del Centro al tráfico privado para 2023, el RACVN, como club automovilista que vela por los intereses de los conductores en el uso racional y responsable de su vehículo, manifiesta su total disconformidad y oposición.  

banner-miclasico.gif El RACVN considera que la medida que plantea el Consistorio donostiarra centrada en la restricción de los automóviles no responde a las demandas y necesidades de movilidad de los ciudadanos y creará nuevas dificultades a los donostiarras y a la vida comercial de la ciudad y de los propios donostiarras. La ciudad es el lugar donde se desarrolla la vida cotidiana de los ciudadanos, en este caso los vecinos del Centro, que son a quienes el Ayuntamiento ha de atender y servir primordialmente. Las medidas propuestas van contra su derecho a desarrollar sus actividades diarias en sus domicilios y su entorno vital, secuestrándoles y encarcelándolos arbitraria e injustamente. El nuevo Centro va a ser un lugar destinado al turismo que expulsa a los donostiarras y al comercio tradicional.
 
Además, según han manifestado los propios responsables del Ayuntamiento, se pretende situar al Metro como epicentro y condicionante de toda la movilidad de la ciudad, casi por imposición, sin tomar en consideración que este transporte presenta innumerables carencias y limitaciones de movilidad.

 

Además, al RACVN le parece contradictorio que Donostia-San Sebastián sea una de las capitales con un impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM) más caros de todo el Estado, a la vez que se ataca constantemente a los automovilistas, se reduce su espacio en superficie y se pone cada vez más trabas y dificultades al uso del vehículo privado. Si el Ayuntamiento apuesta por dificultar y empeorar los servicios e infraestructuras que ofrece a los automovilistas, debería ser consecuente con su apuesta y reducir los impuestos que pagan los propietarios de los vehículos. 

Además, el nuevo plan presenta carencias y muchas dudas:

1.- Si se quiere reducir el tráfico de vehículos en el Centro, ¿por qué se siguen licitando nuevos parkings en la zona como el de San Bartolomé?  ¿cómo se va a garantizar el acceso a los parkings ya existentes en la zona restringida?

2.- ¿Qué pasa con las motocicletas? 

3.- Los parkings disuasorios siguen brillando por su ausencia. 

4.- ¿Por qué no establecer un lugar estratégico de acceso a los autobuses interurbanos que evite que éstos accedan al Centro de la ciudad y se detengan en un carril de la Avenida de la Libertad, obstaculizando el tráfico y generando ruidos y emisiones perfectamente evitables?

5.- ¿Obligar a los donostiarras a dar una vuelta mayor con su vehículo para acceder a otra zona es eficiente y reduce las emisiones?  

6.- ¿Los ediles van a predicar con el ejemplo?  ¿El coche oficial dejará de estar en el Ayuntamiento, comenzará a estacionarse fuera del área restringida y será utilizado sólo para desplazamientos interurbanos o será considerado como "una excepción" y podrá circular por el Centro sin restricción alguna?

Artículos relacionados


    ...

2 comentarios

  • yomism Viernes, 26 Noviembre 2021 00:27 publicado por yomism

    Cualquier prohibición de circular a un vehículo homologado al corriente de IVTM e ITV sin episodios de contaminación y siempre que esa prohibición no sea temporal está totalmente fuera de la legalidad. Es un atropello a normativa Europea y Española que autoriza a circular a esa propiedad privada. Hay que denunciar y llevar a los tribunales cualquier ciudad que sin medidas de contaminantes claras, concisas e histórico que lo demuestre intente cortar nuestras libertades. Las reglas del juego se respetan. Ni un paso atrás contra estas mafias internacionales.

  • Pepito Grillo Martes, 23 Noviembre 2021 23:19 publicado por Pepito Grillo

    Eso si,el transporte público puede romper el asfalto que todos pagamos e invadir los carriles contrarios a su circulación a velocidades superiores a las permitidas por la cara.
    Por la cara dura del concejal de movilidad que tiene la genial idea de dotar a la ciudad de un transporte de un tamaño o volumen tal como si de la ciudad de Nueva York se tratara,creando mayor caso circulatorio.
    Como si no contaminasen semejantes trastos,acústica y medioambientalmente.