10-11-12 marzo
40 vehículos comprendidos entre 1907 y 1955 entre los que predominan como cabe esperar las marcas americanas, aunque algunas poco conocidas como Chenard-Walcker o Hupmobile pero que no dejan de desmerecer a los clásicos Ford, Chevrolet, Buick o los lujososo Packard o Rolls Royce, pero todos ellos con un punto en común, la excelente conservación que llevan a cabo sus propietarios.
Desde el Balneario de Archena, lugar habitual de encuentro para los participantes, dio comienzo la décimo séptima edición de este rally que ya es un clásico en el calendario de eventos del mundo del motor antiguo.
La primera etapa fue la encargada de llevar a los participantes al norte de la Región, ocupando las calles y haciendo salir a los habitantes de Jumilla para poder contemplar los vehículos participantes y a los propios participantes que durante las 3 etapas que dura el evento van caracterizados con trajes de época acordes con su vehículo. Tras el recorrido por el centro de la ciudad los vehículos llegaron hasta el Monasterio de Santa Ana del Monte, acabando así el primer sector de la primera etapa, que continuaría tras un espectacular almuerzo en la localidad.
Recuperadas las fuerzas y revisados algunos vehículos el rally volvió a Archena, lugar elegido este año como campamento base para todas las etapas, por lo que la etapa también saldría del Balneario de Archena, lugar idílico para un evento de estas características por su enclave y edificaciones acordes por completo con la temática de este rally.
Esta segunda etapa tomo dirección al noroeste, pasando por Cehegín para llegar hasta Caravaca de la Cruz, lugar casi de obligada parada en este año jubilar, por lo que se aprovechó para estacionar los vehículos en la Gran vía de la localidad y compartir con lugareños y peregrinos este museo rodante, por cierto, aprovechar para agradecer a las autoridades de las localidades por las que pasa el Rally la colaboración prestada, ya que cortar una avenida principal un sábado en el centro de una localidad para que aparquen 40 coches sabemos que no es fácil, aunque tuvo su recompensa, no somos capaces de calcular la gente que se paseó entre los vehículos a lo largo de la mañana pero fue una constante de personas que pasaban, se fotografiaban o comentaban junto a los coches, que gusto da escuchar a los abueletes contar batallitas de aquellos tiempos en los que la actualidad era lo que ahora e historia.
Visitado el Santuario de la Vera-Cruz, la caravana partía de Caravaca con dirección al campamento base, acabando así la segunda etapa, aunque no la jornada que se alargaría hasta tarde debido a la cena de gala, momento idóneo para conversar, pasarlo bien y descargar tensiones de las dos primeras etapas que suelen ser las más duras.
Por último, arrancamos la tercera etapa con dirección a la meta en el centro de Murcia, pero no sin antes aprovechar para visitar una pequeña localidad, Molina de Segura, con un pequeño gran descubrimiento para los profanos en ciertas temáticas como fue el Mueso “Mudem” en el que los participantes descubrieron la riqueza histórica de la localidad ya existente desde la época medieval comprendiendo la etapa desde el siglo XI al XV. Es de agradecer el interés que toma la gente en este tipo de eventos, y a pesar de no tener la difusión que se merece un acto de este tipo, fueron muchos los que acudieron al Parque de la Compañía a ver la caravana y que por medio del boca a boca convocaron a amigos y parientes que pudieron también disfrutar de ese pedacito de historia que es la automoción de principios de siglo.
Está claro que la finalidad de este Rally es doble, por un lado mostrar en cada edición diferentes lugares de interés existentes en la Región de Murcia, aprovechando el evento para que los participantes que vienen de fuera conozcan la cultura, historia, gastronomía y costumbres de los municipios murcianos y por otro que los murcianos puedan disfrutar de joyas que algún día estarán en un museo pero que hoy aún podemos contemplar por nuestras carreteras gracias a la pasión y esfuerzo de los dueños de estas joyas de la automoción.
Terminada esta edición y saboreando aún en nuestro paladar el placer de haber convivido con grandes personas durante tres maravillosos días, la dirección del rally ya ha comenzado a trabajar en la próxima edición para 2018, en la que esperamos contar con hasta 50 vehículos y prometemos etapas muy interesantes
Por ultimo agradecer una vez más tanto a las autoridades como a las firmas comerciales que apoyan años tras años este evento y sin las cuales llevar a cabo este proyecto sería una misión imposible.
Un saludo para todos los aficionados y lectores.
J.E. Ros
Club Ruta del Sol
