Con una jornada perfecta en lo climatológico, al menos en la zona más próxima en Cervera, la Plaza Mayor de la localidad se llenó como de costumbre de aficionados, vecinos y curiosos para disfrutar del ambiente previo al banderazo de salida de las 12:15 h tras las habituales verificaciones administrativas y briefing por parte de la organización. Minutos antes de poner la prueba en marcha, se guardó un minuto de silencio en memoria de Jonathan Quinteiro, joven bilbaíno y copiloto habitual de este tipo de pruebas que estaba inscrito en el rallye junto a Alfonso Gallego. Y es que recientemente falleció practicando pesca deportiva sin botella en la costa cántabra, por lo que la Escudería Montaña Palentina Racing hizo entrega de una plaza conmemorativa a sus allegados bajo el sonoro aplauso de todos los presentes.
Cambiante climatología y diferentes modalidades de regularidad
Entrando ya de lleno en el desarrollo del rallye, los equipos abordaron un total de 331 kilómetros de recorrido con 14 tramos de regularidad controlados. Hubo diferentes modalidades de regularidad caso de tramos a tablas, hitos y medias, por lo que la variedad y emoción estuvieron en alza en esta edición. Cabe destacar que la primera sección resultó más complicada de lo previsto, pues nada más atravesar el límite con Cantabria la climatología era adversa y las condiciones del asfalto muy delicadas en algunos puntos.
Por suerte esta preocupación desapareció tras la parada en el habitual en el reagrupamiento de la Venta Morena en San Salvador alrededor de las 16:00 horas, punto en el que se ofreció a los participantes la tradicional parrillada para reponer fuerzas. La segunda sección de la prueba antes del colofón final en la Plaza Mayor de Cervera con la presencia de las principales autoridades nos deparó más igualdad si cabe.
Y es que, en el terreno deportivo, las clasificaciones estuvieron de lo más reñidas durante todo el día debido a las exiguas diferencias tras los 190 controles secretos computados por la organización mediante el sistema de cronometraje vía GPS de la empresa Anube. Tras un “toma y daca” continuo, la pareja formada por el piloto bilbaíno afincado en Cantabria Eneko Conde y su copiloto Marcos Domingo conseguía subir a lo más alto contabilizando un total de 76 puntos de penalización a bordo del Volkswagen Golf GTI de 1989 con el que el actual Campeón de España de Energías Alternativas en su categoría también ganaba en 2016. Como anécdota y a propia petición de los vencedores, no se descorchó el champán para mostrar una vez más el respeto y recuerdo hacia la figura de Jonathan Quinteiro.
Vencedores por categorías
La igualdad fue tal que tan sólo 4 décimas les separaron de los vallisoletanos Angel Represa y Antonio Represa, sensacionales a bordo del Mercedes 190. El podio lo completaban los líderes de la Copa de Escuderías Carlos Díaz y Roberto Rentería con el bonito BMW 318, mientras que Sergio Crespo y Jorge García ganaban el apartado Open con Ford Escort XR3i por delante del Renault 11 GTX de Iván Barrio y Rubén Álvarez. Terceros de la categoría concluyeron Sergio Pérez y Mario González con un Renault 4 TL.
A destacar igualmente el triunfo de los chicos de Lanzero Classic Luis García y Maite Urquiza en Libre sobre su habitual BMW 318is. Tampoco podemos olvidarnos del resto de galardonados, caso de los representantes de Rallymiglia Classic Team como la mejor escudería; el reconocimiento a las féminas Ana Moral y Elena López, así como al participante más jóven Pablo Moro y a los equipos palentinos más destacados, entre los cuales se impusieron Emilio Salmoral y Rafael Orihuela con el Volkswagen Golf GTI.
